5 beneficios de la miel con propóleo para el manejo de la gripa

El resfriado común, catarro o la conocida popularmente como “gripa” es una enfermedad infecciosa viral que afecta las vías respiratorias superiores, es decir, la nariz, senos paranasales, faringe y laringe. En esto radica la diferencia entre el resfriado común y la influenza (o gripe) que afecta también a los bronquios. El resfriado es muy frecuente y a pesar de tratarse de una entidad autolimitada, si genera mucho impacto sobre la calidad de vida de quien los padece. En este artículo se exploran aspectos referentes al resfriado común y su manejo empleando la miel con propóleo.

¿Qué ocurre en una persona con resfriado común?

El resfriado común aparece como consecuencia de la infección por un virus. Una vez ingresa en el cuerpo este virus comienza a multiplicarse rápidamente en las vías respiratorias. Esto desencadena la respuesta del sistema de defensas del cuerpo y se produce inflamación en los tejidos infectados. En buena medida los síntomas que ocurren durante el resfriado común son debidos a la activación del cuerpo ante la infección.

Beneficios de la miel con propóleo para el resfriado común

La miel y el propóleo son utilizados en el manejo del resfriado común por sus múltiples efectos sobre el proceso de la enfermedad:

1. Modulación de la inflamación. Esta combinación de miel y propóleos modula la inflamación en los tejidos afectados por la infección viral lo cual contribuye a su vez a reducir la intensidad de los síntomas de la enfermedad.
2. Disminución de la multiplicación de los virus. La miel y el propóleo reducen la capacidad del virus de infectar células y de reproducirse en ellas. Este mecanismo permite explicar porque esta combinación reduce el tiempo de duración de la enfermedad.
3. Facilitan el movimiento de las secreciones. La miel de abejas tiene efectos sobre la producción de moco y facilita el proceso de expectoración. La miel de abejas también reduce la frecuencia e intensidad de la tos.
4. Control del daño de los tejidos. Tanto la miel como el propóleo controlan el daño oxidativo de los tejidos lo cual tiene un impacto favorable sobre la intensidad de los síntomas y la duración de los mismos.
5. Modulación de la función del sistema de defensas del cuerpo. El propóleo fortalece la capacidad del sistema de defensas del cuerpo para combatir infecciones lo cual hace que sea más dificil que estas se presenten. Este efecto se logra con su consumo regular.

La miel con propóleo puede consumirse de forma directa o en combinación con jugo o bebida caliente.

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Referencias bibliográficas

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