El mundo contemporáneo impone en las personas un ritmo de vida que no siempre es amable: poco tiempo para las tareas, baja asignación a actividades recreativas, altos niveles de contaminación medioambiental, complicaciones laborales y obligaciones múltiples. Adicionalmente poco se enseña sobre estrategias de afrontamiento a todos los problemas que supone la vida. Es decir, existen muchas fuentes de estrés y las personas poco conocen sobre como enfrentarlo de forma adecuada.
Son varios los estudios que han mostrado que un ambiente laboral desfavorable, con altos niveles de estrés, insatisfacción e inseguridad esta relacionado con un mayor riesgo de desarrollar depresión y síndromes de dolor crónico, como la fibromialgia (1, 2).
Estrés y fibromialgia
El estrés es una respuesta natural del cuerpo que le permite enfrentar potenciales peligros internos y externos. Cuando existe una infección en el cuerpo, un problema financiero, un estado de choque emocional o el bullying, por ejemplo, son agentes y situaciones que conducen a la respuesta de estrés. La respuesta fisiológica ante agentes inductores de estrés produce alteraciones en el sistema metabólico, hormonas, sistema inmunológico y sistema nervioso. Hoy por hoy, se reconoce que su activación y regulación explica en buena medida la comunicación mente-cerebro-cuerpo (3).
En efecto esta respuesta esta diseñada para lograr una rápida adaptación al cambio y permitir la supervivencia, sin embargo, no esta diseñada para que se mantenga de forma constante o permanente. La exposición crónica al estrés conduce al desarrollo de alteraciones en el funcionamiento del organismo y a la aparición de enfermedades (4). El efecto más evidente y que aparece con frecuencia y rapidez es la supresión del funcionamiento del sistema inmunológico lo cual facilita infecciones como la gripa. Sin embargo la respuesta crónica afecta negativamente casi todos los sistemas corporales facilitando el desarrollo de diabetes, hipertensión arterial, ansiedad, depresión y cáncer.
El estrés crónico produce modificaciones en diferentes regiones del cerebro, dentro de estas, aquellas encargadas del procesamiento de la información sensitiva, memoria y emociones (5). En buena medida la fibromialgia es resultado de la alteración en el funcionamiento de estos centros de procesamiento de información en el cerebro (aprenda lo que ocurre en la fibromialgia y como se explica su aparición). Las personas con fibromialgia muestran una exagerada respuesta de estrés y esta activación esta relacionada con una mayor intensidad sintomática; además se ha documentado en ellas una mayor frecuencia de estrés psicológico y emocional y síndromes psicosomáticos. También se ha documentado que la inducción de estrés en modelos en animales conduce a la hiperalgesia, un rasgo típico de la fibromialgia. El estado actual de las investigaciones y conocimientos hacen pensar que probablemente el estrés crónico puede ser un inductor de la fibromialgia y es un factor que empeora sus síntomas y manifestaciones una vez ya se padece la enfermedad.
¿Cómo el estrés en el sitio de trabajo se relaciona con la fibromialgia?
Son muchos los ambientes de trabajo que no son amigables para el empleado, al contrario, se le expone a condiciones y situaciones hostiles que pueden afectar su estado de salud. Las personas que padecen esta enfermedad encuentran limitaciones para integrarse al mundo laboral y evidentemente, muchos sitios de trabajo tampoco ayudan a una mejoría en la enfermedad.
Varios son los factores laborales que pueden afectar negativamente a las personas con fibromialgia:
Se ha descrito que los trabajos que implican un cambio de ciudad, alta sobrecarga laboral y donde existe un ambiente propicio para el bullying incrementan hasta en 4 veces el riesgo de desarrollar fibromialgia. Por supuesto, no es el único factor, pero contribuye a su aparición. El entendimiento de estos aspectos debe favorecer cambios en los cargos directivos con el fin de desarrollar ambientes amigables para sus empleados y evitar que el estrés laboral se convierta en un factor adicional que conduzca al desarrollo de la fibromialgia.
La importancia de las estrategias de afrontamiento
Las estrategias de afrontamiento son un conjunto de herramientas que permiten a la persona defenderse o atacar ante una demanda interna o externa que excede sus propias capacidades. Existen tres grandes grupos de estilos de afrontamiento que se presentan a continuación:
Aunque todos estos estilos pueden eventualmente ser válidos, no todos son igual de buenos. Si bien preocuparse o ignorar el problema puedan ser útiles en algún momento, son estilos que favorecen la aparición de diferentes tipos de sobrecarga y estrés. La red de apoyo social ha mostrado ser útil en la forma en la cual los problemas impactan sobre la salud de las personas; es bien conocido que los rasgos de la personalidad afectan estas estrategias pero la activación de la red de apoyo permite un mejor desenlace en las personas con enfermedades crónicas, entre ellas la fibromialgia.
Algunos aspectos deben ser tenidos en cuenta para el entrenamiento en las estrategias de afrontamiento adecuadas:
- Identificar la situación o problema.
- Centrar la atención en las soluciones posibles al problema.
- Establecer reglas específicas para la solución del problema.
- Entender los mecanismos a través de los cuales se realiza el aprendizaje de los errores cometidos.
- Auto-refuerzo sobre los aspectos positivos del proceso.
Evidentemente no es un proceso sencillo y generalmente requiere del acompañamiento de un profesional especializado en este tipo de aprendizaje; sin embargo, por más difícil que parezca, siempre es posible. Los cambios son posibles y necesarios y en el caso particular de la fibromialgia permitirán mejorar el impacto negativo que produce la enfermedad.
Referencias bibliográficas
- Munce SE et al. J Psychosom Res. 2006 Nov;61(5):653-60.
- Boehm A et al. Clin J Pain 2011; 27 (3): 233-9.
- McEwen Bs et al. J Endocrinol 2015; 226 (2): T67-83.
- McEwen BS. Chronic Stress (Thousand Oaks). 2017
- McEwen BS. JAMA Psychiatry. 2017 Jun 1;74(6):551-552
En el año 2015 empeze a tener dolor en mi hombro derecho asociado a movimientos repetitivos, en el año 2019 empiezo a sentir dolor en mi codo izquierdo y en mano derecha allí tengo tendinitis de Quervain.
Luego de la realización de exámenes médicos dónde descartaron enfermedades inflamatorias e autoinmunes, fuí diasnoticada con fibromialgia a lo que no acepto porque estos problemas físicos son asociados a movimientos repetitivos, con esto quiero decir que es de origen laboral. Y ahora no se como demostrar esto.